¿y qué hacemos cuando el vacío es tan grande?
nos queda la música.
y los recuerdos y la nostalgia invaden la pieza y se toman cada rincón
no tiene sentido que todo esto pase por pasar
-o por último que pase luego po-
¿qué es lo que se aprende de todo este frío? ¿de todo este daño?
he dicho mil veces que es la última vez
pero acá estoy haciendo crecer penas de nuevo
temblando por palabras desoladoras que resuenan en todo mi cuerpo
desentrañando el fin de amar con intensidad y sufrir con intensidad
¿será para saberse más verdaderos habiendo tenido sentimientos tan puros?
y qué me importa la pureza de un sentimiento ahora
si me queda el sabor metálico de la no correspondencia
si me insiste el miedo envuelto en razón
disfrazado, si nunca he sido buena para convencerme a mi misma

¿y qué nos queda, entonces, en este desparramo de intentos acumulados y entierrados?
-nos queda la música.


14-07-2014

hace unos meses empecé a descubrir un par de sensaciones que no conocía, y que ahora se repiten bastante. No las puedo describir, son distintas a la alegría, la pena, la nostalgia.
A veces me pasa que siento mucha paz, tranquilidad, y me siento feliz, pero es tremendo. Otras veces tengo tanta pena, pero es una pena dulce, como de resignación, es como aceptar que tengo pena y que está bien.

Me pasa que hay canciones que encuentro tan lindas, que me hacen llorar. Que las escucho y siento cómo me cubren. Música que es preciosa y que se conecta tan bien, que es como parte de uno y de todo.

Canciones que son como de una banda sonora de una película, pero de una película bacan, una película con escenas de cuando fuimos al rio loncomilla en la noche y el cielo estaba genial, de cuando andábamos en un camping nosedónde y te pusiste a tocar guitarra y me dijiste que cada vez tenías más facilidad para sacar temas, y de cuando estábamos en la terraza del escondite y estaba lloviendo y habían truenos, relámpagos y rayos -esa hueá fue mágica-, y de cuando nos quedamos echados en la cama conversando hasta las siete de la mañana, y de cuando era de noche en la Laguna de la Plata y mirábamos el cielo, con una guitarra al lado de la fogata, de cuando llegamos a la cabaña de Pelluhue y nos tiramos patúamente en la cama que estaba sola en una pieza y no había nada más de lo que preocuparse durante días, escenas de cuando nos paseábamos en pijama por el hotel de Bariloche e íbamos a todas las piezas de los demás con toda la confianza.

Sensaciones que descubrí con ayuda eso sí.

O imágenes, videos que cuando los veo siento que estoy ahí, siendo que estoy rodeada de los árboles en la noche, siento el viento que mueve las hojas y las ramas.

acuarela (reprise)

toma, mátame
llévate mi vida entera
no te conformes con ese pedazo que tienes ahora
que has tenido siempre
déjame y apágame
sálvame de agonizar lejos
tómame, siénteme morir
llévate tu melodía, tu piano y tus cuerdas
corta las mías y déjame caer
llévate los colores que me regalaste,
ya desteñidos
tráeme las drogas, no me importa
mátame y luego
tócame y revíveme con tu sangre
cierra mis ojos y ayúdame a pararme
recogeré mi corazón desparramado
para seguir viviendo cerca
como siempre
que aunque no quiera

entré a la pieza y habían restos de ti desparramados por todas partes.

Orden y patria

   Los perros de la calle no caminan junto a los estudiantes en las marchas porque sí no más, o solamente por mojarse y jugar con el “agua” que tiran los guanacos. Ellos los acompañan en el trayecto que todos los días deben caminar para encontrarse con los libros y el aprendizaje, pero también con la injusticia, con la rabia y la desigualdad. Ellos ven cómo en cada manifestación los carabineros se exceden solo un poco y cada vez más a la hora de “controlar” a los secundarios y universitarios. Ellos son conscientes de lo que pasa y no se hacen los tontos. Por eso los perros de la calle les ladran a las fuerzas especiales, y arrancan de ellos. Y se ofenden cuando los comparan con los políticos.

   En cierta marcha, o en todas tal vez, una perra fue testigo de golpes, patadas, insultos. Una pastor alemán que huyó de los entrenamientos, y que ahora veía cómo sus ex compañeros atacaban piernas, chalecos y mochilas de estudiantes. Fugitiva, clandestina. Nunca infiltrada, eso jamás, ya no trabajaba para ellos. Ella corría de un lado a otro, les decía en su lenguaje a los carabineros que pararan. De pronto, fue reconocida por uno de los funcionarios. Lo vio venir, y luego vio cómo la tomaban por sus patas y se la llevaban por la fuerza, quitándole su libertad, convirtiéndola en una de ellos, alejándola de los perros de la calle.

   Mientras la arrastraban, recordaba vagamente unos versos que había oído meses atrás. No podía entender cómo ellos podían decir ser del débil el protector.

(trabajo de lenguaje, intertextualidad. 28 de agosto de 2012)

PD: http://www.youtube.com/watch?v=jNu_GiWgvHc La sinceridad del cosmos - Ases Falsos. La encontré justo  después de escribir esto, y calzó tan, pero tan bien... escúchenla.

me perdí.

me perdí adentro y nunca más salí
ya no sé qué hago y no estoy ni ahí
desde que me soltaste la mano me perdí en mí
me pegaste un balazo y no sobreviví
o en volá yo fui
si, si, yo fui

te fuiste y volviste como veinte veces
y yo ya no podía estar más molida
después seguiste caminando no más, ya no te vi
y ahí me perdí en mí

a veces me da por acordarme de ti
y mi corazón se desangra y queda tirado ahí
tuviste miedo de verme así

gasté todas mi energías durante meses
ya no me podía parar, hablar
no resultó nada y me perdí
no resultó nada y me perdí en mí

a veces me da por acordarme de ti
y mi corazón se desangra y queda tirado ahí
tuviste miedo de verme así

el cuerpo se me enfrió
y la sangre se me acabó
la carne se pudrió
toda el alma se me murió

desde que me soltaste la mano me perdí en mí y nunca más salí



...(a veces vuelvo a estar como antes y resultan estas cosas.
a veces creo que puedas de repente pensar en mí)

yo sé que tú sientes que cuando me mirai pasa algo
pero no te apures; ni yo sé que es
por favor no te confundas con mi ensalada de sentimientos
no creas quizás qué cosas de mi sonrisa
o de cuando te miro los ojos
no podría vivir sabiendo que te dejé pensar algo que no era

es que llegaste tan justo...